QUIÉN hay detrás

QUÉ hay detrás

INICIO

Humor y obituario


Anoche se me murió dormido mi querido amigo Paco con quien tan bien me entendía. Lo recordaré siempre con su sonrisa y su sentido del humor a punto.


Estoy seguro de que le gustaría que lo evocara para los demás, en este momento de tristeza, con unos de sus mejores chistes y ocurrencias:


-.Uno se encuentra con un amigo al que no veía desde hacía poco tiempo y le pregunta:

- Oye, ¿Cómo sigue tu padre?

-Y el otro: Pues mira, igual de muerto que hace quince días.


-.Aquel cura de pueblo estaba siempre muy confiado en la providencia divina. Cada noche, recogía del cepillo las monedas que había, se iba con ellas a la sacristía y las tiraba hacia el cielo para que Dios recogiera las que quisiera. Él, modestamente, se guardaba las quedaban.


-.No sé si éste era el mismo cura o era el del pueblo de al lado. El caso es que los vecinos, como había sequía, estaban muy preocupados por la pérdida de la cosecha y no paraban de dar la tabarra al cura para que sacara el santo en procesión rogatoria suplicando la lluvia.

     Y el cura: Yo, si queréis, os saco al santo, pero ya os advierto que no está de llover.


Paco sabía de qué hablaba porque estaba en que su tío, el cura Honorio, iba para santo.


-.Hacía tiempo que yo había construido una figura a base de unos cuantos tetraedros completando un conjunto a modo de rosco que quedaba muy atractivo. Como todo ingeniero sabe, y Paco lo era, los tetraedros tienen seis aristas iguales, así que le pregunté: A ver, Paco, si me dices qué hay de común en los componentes de esta figura. Sin dudarlo, como por impulso de un resorte, me suelta: ¡El agujero!


-.Poco antes de quedarse dormido para siempre me comentó: Esperaba la llamada de Mariano para felicitarme por mi cumpleaños. Mariano era dos años mayor que él y, desde que en el colegio donde coincidían, había sido su protector, no faltaba a la cita. Pero como pasaron quince días, añadía Paco, y no llegaba la felicitación decidí, sin más, cumplir mis 92.