Antes de analizar estos versos será oportuno ofrecer la estructura global del poema para mejor encaje de una parte en el todo:


    * Los enemigos del Cid (bando de Carrión) consiguen enemistar al Rey con el Cid para que lo destierre (no es la primera vez que ocurre tal).

    * El Cid logra rehabilitarse con sus campañas y obtiene el perdón del Rey mediante regalos.

    * Los de Carrión ven que pueden obtener riquezas del Cid casándose con sus hijas, y lo consiguen con el apoyo real.

    * Obtenidas las riquezas, los de Carrión se deshacen del medio utilizado para obtenerlas, las hijas del Cid.

    * El Rey es el árbitro en todas las peripecias hasta el final, en que sigue implicándose en el nuevo casamiento de las hijas del Cid con los Infantes de Navarra y Aragón.

    * El resto es relleno: conquistas, viajes, etc.


Volviendo a los nueve versos anteriores se aprecia, en primer lugar, que todos, excepto el último son asonantados en á acentuada, que es una de las cuatro formas de asonancia más usadas en el poema. Las excepciones de rima no son muchas, pero las hay.


Probablemente se justifican por un efecto de paragoge, es decir por la adición de un sonido al final de un vocablo. Por ejemplo, decir fraque en vez de frac, o pronunciar, alargándola, la e muda de final de palabra en francés, efecto éste muy llamativo especialmente en las canciones. Y es que, no hay que olvidarlo, el Cantar del Cid fue compuesto para ser cantado, si se me permite la redundancia.


Igualmente se destacan los dos hemistiquios de cada verso, con marcadas cesuras.


Los nueve versos escogidos son los últimos de la estrofa 18 que lleva el título de:


"El Cid recibe a los nuevos compañeros; oración de Dª Jimena; el Cid se marcha de Cardeña y llega al Duero".


El poema tiene un total de 3735 versos organizados en 152 estrofas que suelen tomar el nombre de tiradas porque sus versos se leen de un tirón; su extensión no es regular como en el caso de los poemas convencionales. La tirada elegida es una de las más largas, 109 versos; la media es de 25 versos por tirada.


La métrica de estos nueve versos es muy representativa de la del poema ya que la cantidad de sílabas de los primeros hemistiquios oscila entre 6 y 8, y la de los segundos entre 6 y 9. La cantidad máxima y mínima por hemistiquio, en el conjunto del poema es de 14 y 4, respectivamente.


Veamos a continuación algunas particularidades de aquellos versos que merecen cierta reflexión.


ixiendos’(e) va de tierra          el Campeador leal


Da a entender que el Cid está desterrándose porque se acerca a la frontera de Castilla con la tierra de moros. Nótese el apóstrofo al final de ixiendos: es una tendencia marcada al apócope, en el lenguaje poético, de los complementos pronominales enclíticos se, me, te.


"el Campeador leal": Ya empiezan a aparecer epítetos épicos adscritos a personas, que luego se prodigarán profusamente: El bueno de Vivar, el que en buena hora nació, el que Valencia ganó, el Campeador (el más usado), el que en buena hora ciñó espada, etc.


Pero es en el verso siguiente cuando por primera vez aparece un epíteto dedicado a una ciudad, San Esteban, en este caso: una buena çipdad. Hay quien piensa que el poeta quería así extender la fama de su lugar a otros ámbitos entonces desconocedores de ella.


"de siniestro Sant Estevan ... de diestro Alilón las torres ..."


Aquí se suscita una polémica porque parece imposible dejar San Esteban a la izquierda caminando aguas arriba del Duero, dado que el pueblo está pegado al río. Además, como hubo de pasar por Alcubilla del Marqués, que está apartada del río hacia el norte, parece a algunos que la comitiva bordeó San Esteban por detrás, dejándolo francamente a la derecha.


A mi juicio no tiene mucha fuerza la objeción si pensamos que el poeta era del lugar. Viniendo del norte, procedente de San Pedro de Cardeña y Silos, y bastante antes de girar 90 grados a la izquierda para acomodarse al curso del Duero, se tendría que ver San Esteban de Gormaz a la izquierda y las torres vigía de Ayllón más lejos, a la derecha. Y tampoco sería imposible pasar entre el pueblo y el río tal como se practica hoy.


"la calçada ..." Se trata de la calzada romana que va de Oxama (Osma) a Tiermes y que atraviese el Duero por un vado. Nunca nos cansaremos de agradecer los beneficios que nos dispensaron los romanos en toda España. Aún recuerdo haber visto de niño, de la mano de mi padre, las ruinas romanas de Osma de las que retengo en mi memoria unas grandes planchas de plomo que recubrían las conducciones de agua de la ciudad.


"Vánsele acogiendo          yentes de todas partes."        Este verso necesita una explicación.


El Cid tenía ganada fama entre las gentes de ser esforzado conquistador y leal con todo el mundo, desde el Rey a sus mesnaderos. Pero esto no era suficiente para que de todas partes acudiera la gente a él y le siguiera. Tenía otra cualidad no tan evidente pero mucho más valiosa. Era muy inteligente como demuestra el poema en bastantes ocasiones: Táctica de la tienda abandonada en el campamento ante Alcocer, estrategia de conquistar la zona sur de Valencia antes de atacar la ciudad, etc.


Quiero decir que los hombres se le adherían por la presumible gloria y paga futura, pero también por los dineros contantes y sonantes del momento. Él sabía que no podía obrar con ellos lo que D. Quijote habría de hacer con Sancho siglos más tarde manteniéndolo en permanente espera de una ínsulaula.


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